el caucho, la causalidad y el karma

Charles Goodyear llegaba tarde a cenar, su mujer estaba más que molesta con los experimentos malolientes e inútiles que hacia en el garaje de su casa, así que, para no enfadarla más, tiro su ultimo experimento a la estufa para eliminar pruebas - caucho y azufre - y op!!! , aparece el caucho vulcanizado. El resto es historia, la mayoría de nosotros llevamos su "accidente" en el coche

María se levantó esa mañana, iba tranquilamente por la calle y cuando cruza por un paso de peatones con  semáforo, un coche la atropella.

Pregunta en ambos casos, ¿fue casualidad? ¿ o fue causalidad?

Con la información que he dado, nos sale decir casualidad, si añadiera que Goodyear llevaba años experimentando y que el coche que atropello a María tenía en semáforo en verde (y María también)  ¿Seguiría siendo una causalidad? o ¿hay una causa? (causalidad) 

En este caso es más probable contestar causalidad, es más lógico, es más racional ... pero es mentira, los dos casos son fruto claro de la casualidad (en el primero el termino correcto es serendipia) pero no lo podemos aceptar.

No podemos aceptar que (en general)  las cosas pasan, porque pasan, y ya está. 

Aquí aparecen los dos sesgos muy interesantes y una ley. De esto va el post, de como ser conscientes de que existen y hacerlos jugar a nuestro favor.

Así pues aquí trataré sobre 3 temas :

- el sesgo de la causalidad

- el sesgo de la sensación de control 

- la ley del Karma 

El sesgo de la causalidad 

Debemos aceptarlo, nos fastidia que no entendamos el porqué de las cosas, nuestros ancestros "inventaron" al dios de la tormenta y buscaron aplicar su ira con sacrificios cuando se enfadaba, los periódicos deportivos atribuyen a un mal diseño estratégico perder un partido (pocas veces a un desafortunado rebote...), la bolsa a que el Emir de Kuwait se ha levantado resfriado ... 

Afinando más, Jung habla de la sincronizidad, es decir, la conexión de subconsciente  colectivo... ufff!!

En fin, lo que sea con tal de eliminar lo máximo posible la casualidad como elemento motor de la mayoría de las cosas. Por eso es un sesgo, un sesgo que lo único que hace es estar continuamente agobiados por lo que nos puede pasar,

Solemos confundir causalidad con correlación, un ejemplo divertido, hay menos piratas por culpa del aumento de temperatura de los océanos, correlación alta, causalidad nula...

Voy más allá, yo afirmo que la mayoría de las cosas que nos influyen son producto de la casualidad y cuanto antes lo aceptemos, mejor, porque nos permitirá f tener una mejor experiencia vital.

Dado que la mayor parte de las cosas que nos pasan, son producto de la casualidad nos conviene hacer 3 cosas 

• preocuparnos poco
• mantener una actitud positiva 
• y ver lo que si que podemos hacer 

El sesgo de la sensación de control 

Hasta aquí vamos bien, vamos a ver lo que podemos hacer y aquí entra nuestra segunda trampa, queremos controlar.

Entonces hacemos estupideces tales como 

• pulsar más veces el botón del ascensor para ver si baja más deprisa
• Intentar "ganar" a una máquina tragaperras (buscando patrones) 
• Asumir riesgos innecesarios (los pecados de juventud, el ejemplo claro)
• Nos comprometemos a morir con un tema, creyendo que así controlamos algo más, ojo con esto porque es posible que al final te mueras de verdad

Pero claro, aceptamos que hay casualidades, pero también hay causalidades y ahí somos los amos. Esto es la forma más evidente de tomar malas decisiones.

Por ello, sugiero en este caso tomar en consideración dos cosas más: 

• mirar los temas con perspectiva
• determinar con objetividad sobre qué palancas puedes actuar y evaluar sus resultados

La ley del Karma  

La casualidad tiene unos límites claros, es en los casos donde las consecuencias se pueden derivar, con alta correlación, de nuestras acciones previas.

En este punto quiero ser muy respetuoso, porque he optado por simplificar al máximo y he decidido usar como referencia  La Ley del Karma que se enuncia como que todo lo que hacemos tiene consecuencias para nosotros o para otros. 

Es decir, que nuestros actos aplicados a nosotros, se pueden leer como causalidades y aplicados a los demás como "casualidades"

Pues vaya, resulta que no somos tan inocentes como creíamos al principio, lo siento, pero es la verdad, todas las acciones tienen consecuencias en todos los niveles.

De aquí, salen las dos últimas ideas que quiero proponer 

• Preocuparnos de que lo que hagas tenga un buen fondo moral, físico o espiritual 
• y cuidarnos , corolario directo de la primera idea

Así pues, en resumen, si bien la vida es un conjunto infinito de casualidades, no podemos ni debemos quedarnos quietos, tal vez podamos hacer algunos de los temas que propongo, como resumen 

• preocuparnos poco
• mantener una actitud positiva 
• ver lo que si que podemos hacer 

• mirar los temas con perspectiva
• determinar con objetividad sobre qué palancas puedes actuar y evaluar sus resultados

• Preocupate de que lo que hagas tenga un buen fondo moral, físico o espiritual 
• y cuidarnos, corolario directo de la primera idea

Todo esto con una buena dosis de optimismo, porque nosotros decidimos como nos vamos a tomar las cosas, nadie, absolutamente nadie lo hará por nosotros. 

Para entender esta actitud de forma brutalmente transparente sugiero ver el video de Randy Pausch - La última lección - donde, ya sabiendo que es un enfermo terminal perfila su modo de ver la vida, y que lo resume en una frase genial 

No importa lo mal que estén las cosas, siempre puedes empeorarlas con tu actitud