De las montañas rusas y las sopranos

La música barroca, y en especial la ópera, tienen algo en común con las montañas rusas. Nunca preves cuando suben o bajan , y pasan de la máxima pasión, a la mayor calma, en quince acordes, para entenderlo basta ver el vídeo que he incluido de la (más impresionante soprano que existe, por encima de la Callas y la Caballé).


Y las montañas rusas, no son más que una mala reproducción de la vida. Cuando subimos creemos que no pararemos de hacerlo, cuando bajamos nos agarramos fuerte y chillamos como locos ....


Bueno. no es exactamente cierto, hay una sutil diferencia, en la vida, no siempre de lo esperas, por ejemplo, no sabes cuando acaba la atracción, en las montañas rusas sí .


Tampoco sabes hasta cuando subirás ni hasta cuando bajarás  (si no que se lo expliquen a Berlusconi, Papandreu, Socrates o Rodriguez Zapatero). Lo que significa, que, en el fondo, NO SABES hasta donde llegan las CAUSAS pero si las CONSECUENCIAS.


O lo que es lo mismo, cualquiera (yo el primero) puede chillar bajando una montaña rusa pero, casi por seguro que si:
  • lleva el cinturón de seguridad ( o lo que es  lo mismo TIENE UN PLAN)
  • va cogido a la barra ( es decir, TIENE UN PLAN B)
  • o, alternativamente, levanta los brazos (confía en " la máquina") 
... tan mal no lo pasará.


Olvidemos la V's, L's, W's .... es la "hora de los sensatos", no descartemos que las cosas puedan ir peor, pero no olvidemos que, a la postre, aunque no sepamos cuando empieza la "fiesta", ni cuando acabará, ni si la veremos acabar o ni si  estamos invitados ...


CONVIENE AGARRASE FUERTE Y LLEVAR, y en la medida que podamos, EL TIMÓN DE NUESTRA VIDA 


Como dijo Willian Ernest Henley


No importa cuán estrecho sea el portal, cuán cargada de castigos la sentencia, soy el amo de mi destino: soy el capitán de mi alma 
Y por si fuera poco, ¡Aquí va la Bartoli!

Comentarios

Entradas populares de este blog

de Karate Kid y la importancia de respirar

De como construir una catedral picando piedras

De los pandas y la filosofía