De la justicia verdadera

De la carta escrita por el equipo de Caritas Parroquial de la Iglesia del Josepets de Barcelona

Todo el mundo quiere vivir bien, pero para que este sueño se realice es necesario que dispongan de dos tipos de bienes.

Bienes de justicia y bienes de gratuidad 

Bienes de justicia, son los que permiten tener un mínimo de calidad de vida: la comida, un hogar, ropa, trabajo y la libertad. Son los que podemos exigir como ciudadanos a nuestros políticos, como miembros de la sociedad en que vivimos.

Bienes de gratuidad  son los que debemos compartir con el resto de las personas que nos rodean, los podemos ofrecer cada uno de nosotros, ..., dar consuelo a los que están tristes, afecto y amor a los que se sienten solos y esperanza a los que nos les van bien las cosas.  Estos bienes no se pueden negociar, ni medir, son gratuitos, los debemos dar como si todos fueramos hermanos.

En situaciones complicadas, con la actual, es donde debemos salir un poco de nosotros mismos y hacer algo para que las cosas mejoren.
Conviene actuar, ofrecer algo de esos bienes gratuitos, que a menudo desperdiciamos en rencillas y enfados infantiles, y ser un faro de esperanza.

Vale la pena leer las palabras de Santa Teresa de Calcuta dijo "No deis sólo lo superfluo, dad vuestro corazón."