De los grandes finales

Una trayectoria vital o profesional tiene muchos valles y algunas cimas, ganamos, perdemos, empatamos, ... pero es el final lo que cuenta. Tal como decía Shakespeare " Bien está lo que bien acaba" .

No cualquier final vale ¿como terminar una tarea, un proyecto o una acción con la dulce sensación de triunfo? se me ocurren algunas cosas :

• Justo antes de que acabe, aún podemos pensar que todo puede fallar, un segundo después de que se termine, debemos pensar que hemos dado lo mejor de nosotros.
• Es bueno "Acompañar" el cierre de la tarea o proyecto. En tono doméstico, no se acaba doblando calcetines, se acaba poniéndolos en el cajón.
• Debemos insistir, insistir e insistir ... que el éxito es cosa de muchos. Y bebernos lentamente y disfrutando nuestro vasito privado de éxito.
• Demos las gracias a todos los que han participado (mucho o poco). No hay nada mejor que hacer que todo el mundo se sienta participe del éxito.
• Es el cierre el momento de recordar(mucho) lo bueno y (poco) lo malo. Hay hasta algunas lecciones que se pueden aprender en ese momento, con la epidermis sensible.
• Celebrémoslo, aplaudamos, gritemos, riamos ... y cerremos rápido, cuando aún nos quede mucho del sabor dulce de la victoria.
• No nos debemos cegar con el triunfo, como le decía el esclavo que portaba la corona triunfal encima del emperador romano en el desfile de la victoria "Memento moris" (recuerda que eres mortal)
• Y vayamos a por la siguiente etapa, porque la vida es el camino no la meta.

Una última reflexión, como dijo Winston Churchill "El éxito es aprender a ir de fracaso en fracaso sin desesperarse.", pues eso ... ¡ A trabajar !!!

post scriptum : este artículo sí que está dedicado, a un gran profesional, que nos ha dado a muchos grandes lecciones de sentido común.