De la bondad y el síndrome del perro San Bernardo

Finalizado el artículo con a (amistad) me he propuesto un reto más complicado, el artículo sobre la b (bondad). Y es que esto de la bondad no es casa fácil.

La bondad es llevada a la práctica consiste en ser bueno.
Ser bueno es "amar al prójimo" y "poner la otra mejilla", es, en definitiva ser "buena gente".

Aquí van unos sencillos consejos que podemos tomar en cuenta para ser buenos  (o bondadosos) :

  • Ser bueno no significa ser tonto, es decir, que tenemos que amar al prójimo, pero más en el sentido de respetarlo (no humillarlo) que en el de dejarnos tomar el pelo ...
  • Ser bueno significa tratar a los demás como quieras que te traten a ti , como dice Krishnamurti "el bien es la negación del rencor"
  • Ser bueno nos exige una cierta renuncia al "yo", ser bueno significa procurar ser menos egoísta y mirar más con los ojos de los demás
  • Ser bueno no es sólo estar siempre haciendo cosas para los demás, no se gana uno el respeto solo dando, sino también recibiendo (interesándose, acompañando la acción - no haciéndola - ...)

A medida que conscientemente mostremos esta virtud,  mejoraremos nuestro dialogo interior, mostraremos un agradecimiento sincero y la gente confiará más en nosotros, porque la bondad se imita. Tal como dijo Confucio 

El hombre bueno encuentra la paz en el amor

Una advertencia final : el exceso de una pretendida bondad activa (es decir hincharte a ayudar a los demás y no enseñarles a ayudarse a ellos mismos) nos puede llevar al "Síndrome del Perro San Bernardo" (1) , que básicamente viene a decir que cuando nos lanzamos siempre a ayudar a todo el mundo podemos acabar rodeados de "egoístas insanos" y que hemos sobrepasado el nivel de bueno para llegar al nivel de tonto altruista. .

... a ser buenos ...

(1) "Coaching estratégico" de R. Milanese y P. Mordazzi, un más que entretenido libro donde se explica el caso

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