De las retiradas y los fracasos

Frente a un problema, creo firmemente que es el hipotálamo (la parte más primitiva) la que nos plantea las opciones : huir, quedarse quieto (y esperar que el problema - léase enemigo- desaparezca)- o atacar.

Una vez planteado el dilema, es nuestro neocortex quien decide, es en estos momentos cuando debemos tomar un segundo y reflexionar la frase de Henry Ford: "Los que renuncian son más numerosos que los que fracasan" .

Ya he incluido el tema del fracaso en otros artículos, ahora querría atacar otro obstáculo, renunciar. El que renuncia a tomar una decisión consciente, renuncia a mejorar como persona, tal como dice el Mahabarata "Hay que luchar, Nadie llega a la perfección por mera renuncia".

Es por ello necesario luchar y así enfrentarnos a nuestros miedos, a nuestras inquietudes, a nuestras debilidades, y practicar nuestra voluntad, porque "Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica. Esa fuerza es la voluntad." (Albert Eisntein), solo desde esta lucha voluntariosa podremos cambiarnos nosotros y ayudar a cambiar nuestro entorno y el mundo.

Y aunque a veces el objetivo parezca imposible, y la meta inalcanzable, hay que saber luchar no solo sin miedo, sino también sin esperanza.

Suerte y al ruedo.