ENQUIRIDION - Un manual de sentido común

Por más que el mundo avance, y con ello las teorías de "management" y nuestros sesudos amigos los consultores, yo me quedo con los clásicos. Y si tengo que escoger, escojo a Peter Drucker, que sin tanta parafernalia, dijo que debemos conocer nuestras fortalezas, y construir(nos) desde las mismas , o lo que es lo mismo que si la vida te da limones, pues haz limonada. Un libro clásico de Drucker (" El ejecutivo eficaz" - 1966 - ) resume mejor que nadie que es eso de ser un ejecutivo eficaz. Para nuestra reflexión, consiste en : Aprovechar eficazmente el tiempo Enfocarnos en contribuir y dar valor añadido Desarrollar las fortalezas propias y las de nuestros equipos Tener claras las prioridades y los objetivos Sistematizar la toma de decisiones: definir el problema, decidir la solución, convertir la decisión el acción (quien, como, cuando, donde ...), seguir el resultado de la misma y corregir si es necesario No es más ni menos complicado, un proverbio chino dice ...

Tras largas y (a veces) sesudas horas de reflexión he llegado a la conclusión que desanimarse (un poco) es bueno . Lo que no es bueno, es desanimarse durante mucho tiempo o desanimarse muchas veces. ¿Porqué es sano desanimarse? Porque nos desaloja de la zona comoda y nos recuerda que lo inesperado o indeseado, también forma parte de nuestra trayectoria vital Porque nos muestra que algo (en nosotros) no está funcionando como esperamos o pretendemos, con lo que, resulta necesario buscar alternativas o soluciones Porque nos permite (o nos obliga) a girar nuestro foco hacia nosotros mismos para encontrar dichas soluciones (incluida como tal la aceptación de una situación ) Tres recetas (infalibles) contra el desánimo: Animemos a los demás ( mientras buscas la solución o la respuesta) Mostremonos optimista (bien mirado, no se gana nada siendo pesimista) Entrenemos nuestra resistencia a la frustración (todo pasará, tambien esto) Tal como decía Benjamín Franklin decía “no hay beneficios sin ...

No siempre hace falta pensar en grande para darse cuenta de cosas muy importantes, por ejemplo. ¿A qué tenemos miedo cuando vamos al dentista? La respuesta parece fácil: a que nos duela, pero no es la acertada, lo que realmente nos asusta y nos lo hace pasar mal es la indefensión . En el es dentista, como en el médico, como frente a una situación que aparentemente nos supera, donde y cuando nos sentimos indefensos, y eso, arrastra otros sentimientos, la cobardía, el miedo, la ira.... ¿Cuál es la cura para la indefensión? la confianza . Vuelvo al ejemplo del dentista, si confiamos en que lo hará bien, puede que duela, pero no dolerá tanto, puede que no seamos los "héroes del torno", pero podremos pasar ese rato, cuanto menos, un poco mejor. Y, como no todo es ir al dentista, para no sentirnos permanentemente indefensos es necesario que : Confiemos en nosotros mismos y demostrémoslo Confiemos en nuestros equipos y nuestro entorno, porque ellos forman parte de la solución no par...

José Luis Martín Descalzo, sacerdote y escritor, escribió un buen número de artículos que fueron compilados en libros cuyo título general era el de "Razones para ...". Son una delicia de lectura, la verdad. Releyendo el que lleva por título "Razones para la Esperanza" (porque como decía él, no hay que leer muchos libros, sino releer los buenos "non multa sed multum") me he quedado con una reflexión que quiero compartir: "Bingo, el perro de mi vecino el cazador, ha vuelto cojo de la cacería del domingo (...y aún así ..) corre, salta, todo, sin tocar jamás el suelo con su mano herida. Se diría que toda la vida hubiera tenido solamente tres patas. Yo lo contemplo con asombro y admiración y me digo que Bingo es mucho más inteligente de lo que somos los hombres. Porque conozco a centenares de personas que cuando les producen alguna herida se pasan meses y meses apoyándose en la zona lastimada como si no tuvieran otra para caminar (...) Podrían vivir acept...

En estos últimos días he recibido algunos correos electrónicos, con sentencias en latín como respuestas precisas o aclaraciones a determinadas cuestiones que se plantearon. Así pues, visto que Quidquid latine dictum sit, altum viditur (cualquier cosa dicha en latín suena profunda). muy precisas, me decidí a investigar un poco y proponer algunas ideas de mejora apoyado en frases latinas, tales como estas: La acción reflexiva y el movimiento son la clave Acta non verba (Acciones, no palabras) La constancia es la base de la acción porque Gutta cavat lapidem non vid saepe cadendo (la gota agujerea la piedra, no por la fuerza, sino por la constancia) Que dar ejemplo ayuda porque Ferre quam sortem patientur omnes, nemo recusat ( nadie se niega a soportar lo que todos los demás soportan’) Que no es bueno complicarse la vida Entia multiplicanda non sunt sine necessitate (es de Guillermo de Ockam, una vez encotrada una respuesta satisfactoria no es bueno seguir calentándose la cabeza..) Y, f...

Una historia Zen : ¿Que és lo que se mueve? Un maestro zen volvía de su paseo matinal cuando, en el portal del monasterio, encontró a dos monjes discuento ante una bandera con la efigie de Buda que ondeaba al viento. - ¡Lo que se mueve es la bandera! - gritaba uno - ¡No, lo que se mueve es el viento! - contestaba el otro acalorado. - ¡Te equivocas absolutamente! - ¡Tú ves la consecuencia pero no la causa! La discusión iba subiendo de tono hasta llegar casi a las manos. Pero entonces vieron que había llegado el maestro, y los dos le preguntaron al unisono: - Maestro, ¿qué es lo que se mueve, la bandera o el viento? - Ni una cosa ni la otra - concluyó-, es vuestra mente lo que se mueve (Extraigo la historia del libro "El zen de la empresa" , de Yuki Ojiro y Francesc Miralles ) Algunas consideraciones , para que reflexionemos : Es necesario que permanezcamos navegando centrados en nuestros objetivos Sin preocuparnos qué hace mover la bandera (es decir, de los rumore...

Con frecuencia solemos olvidar para estar y para seguir vivos (de verdad, no solo sobreviviendo) hace falta tener metas. Estas metas pueden ser tan pequeñas, como levantarse de la cama para ir a comprar el periódico, o tan "grandes" como eliminar todos los problemas del mundo. La falta de metas, aunque solo fuera el deseo de sobrevivir, es como escribe Primo Levi en su libro "Si esto es un hombre", lo que convertía a un prisionero de un campo de concentración en un "musulmán", un muerto andante. Hay un ejercicio que creo que es muy conveniente, para mantenernos en la ilusión de estar, hacer listas. Si, si listas de cosas que queremos hacer, sitios que queremos visitar, libros que queremos leer. Porque, hay listas verdaderamente fundamentales para nuestra vida, voy a recordaros dos : la carta a los Reyes Magos y la lista de la compra ... Así que, propongo que ensayemos el siguiente ejercicio: Fijémonos 3 metas u objetivos para un trimestre Hagamos una lista...