Zenón, las paradojas y la empresa

Una vez pasados ciertos acontecimientos, tratamos de encontrar una explicación - el mercado, la competencia, el tiempo, el gobierno ... - y si no la encontramos, nos la inventamos Y una de los mejores inventos es usar este argumento "Era esperable que pasara, todo el mundo sabía que la estrategia era errónea pero no tenían otra opción " De hecho parece un argumento válido pero no lo es, especialmente si nos preguntamos que querían decir con "no tenían"·: ¿había otra opción y no se pudo hacer? ¿había otra opción y no se quiso hacer? ¿había, de hecho, alguna otra opción? Este tipo de expresiones, tan frecuentes en el lenguaje ordinario, político, económico y empresarial, se denominan falacias. Se entiende por falacia aquel argumento que es invalido pero que tiene apariencia de válido o bien que, pretendiendo probar algo, de hecho no prueba nada. Un ejemplo muy sencillo Si llueve la calle está mojadas, así pues, como la calle está mojada, es que llueve o llevado a l...